Entienda en este artículo si la empresa puede monitorear al empleado, hoy no existe una legislación que aborde directamente este tipo de cuestión.

Esto significa que el ordenamiento jurídico brasileño se basa en diversas leyes para elaborar un consenso a partir del entendimiento común, ya que para este caso no existen reglas específicas.

Sin embargo, para brindar el respaldo jurídico correcto y basarnos en lo que debe entenderse, abordaremos lo que dice nuestra Constitución Federal, una herramienta utilizada para respaldar cuestiones sobre la privacidad de los brasileños en general.

En el artículo 5º, inciso X, tenemos la definición de la importancia de preservar la intimidad individual:

X – son inviolables la intimidad, la vida privada, el honor y la imagen de las personas, garantizado el derecho a indemnización por el daño material o moral que resulte de su violación”.

Sin embargo, se entiende que las empresas tienen el derecho de velar por la seguridad y salud de su negocio y supervisar los entornos y las personas que desarrollan sus actividades.

Entonces, el monitoreo se puede hacer, siempre que se cumplan premisas básicas que no infrinjan los derechos garantizados a los ciudadanos.

La forma correcta de adoptar el monitoreo de empleados

Sabemos que hay muchos excesos por parte de algunas organizaciones, existen aquellas que desconocen los límites del sentido común y terminan yendo más allá al implementar este tipo de acción.

Cuando esto sucede, los colaboradores trabajan inseguros, no se sienten cómodos para realizar sus tareas, se sienten excesivamente controlados y no actúan de forma natural.

Todo esto afecta directamente el flujo de trabajo de una manera poco o nada saludable.

Para evitar este problema en su organización, hemos seleccionado consejos para lograr un monitoreo efectivo, inteligente y más sutil, minimizando la incomodidad entre los trabajadores.

Tener transparencia

Es deber de la empresa informar a todos los colaboradores sobre las políticas internas adoptadas y de qué manera se realiza el monitoreo.

Si la compañía implementa acciones de vigilancia, esto debe ser parte de la cultura de la organización y verse como una actividad natural.

Por lo tanto, es una acción que debe discutirse internamente y alinearse con todo el equipo a través de una comunicación efectiva y clara.

Además de esto, los líderes no hablan sobre la necesidad de monitoreo de manera transparente con los colaboradores, y por eso comienzan a sentirse incómodos y a buscar respuestas legales para este tipo de ejecución.

La situación se puede evitar si la empresa tiene como premisa la comunicación abierta y invierte en capacitación adecuada.

Establecer las condiciones de vigilancia en el contrato

El colaborador tiene derecho a saber cuándo y de qué manera se está monitoreando su trabajo y sus acciones.

Por lo tanto, esto debe establecerse en el contrato para que ambas partes no se vean perjudicadas en el futuro, especialmente el empleador.

Si el trabajador lo cuestiona ante la justicia, por ejemplo, la empresa tendrá el respaldo jurídico de que siempre estuvo al tanto de la política interna.

Utilizar los recursos con buen criterio

Aunque la innovación tecnológica hace que nuestra rutina y actividades sean cada vez más expuestas - somos monitoreados en las calles, en el transporte público y en los centros comerciales - en su empresa los colaboradores no necesitan sentirse en un Gran Hermano.

Se pueden instalar cámaras en puntos estratégicos de la empresa que no llamen tanto la atención.

De la misma manera, es necesario entender que los colaboradores no son robots.